Otro viaje del club Lúculo, esta vez por tierras gallegas.
En estas zonas ya se practicaba la vinicultura desde los romanos, de hecho la DO más antigua de Galicia y una de las primeras de España es el Ribeiro, fundada en 1932. Hasta la llegada del siglo 21 se reservaba a la producción de vinos de consumo inmediato, comunes y con pocas pretensiones enológicas. Las administraciones Públicas dando un empuje a las verdaderas uvas autóctonas, han puesto en valor la particularidad de sus vinos. Para apuntalar esta revolución una nueva corriente en el mundo enológico apoyado por el Robert Parker español, Luis Gutiérrez, han puesto este tipo de vinos en el escaparate mundial.
VALDEORRAS
A este interior nos hemos adentrado, descubriendo un nuevo (viejo) mundo. Estas tres denominaciones Valdeorras, Ribera Sacra y Ribeiro se vertebran por el rio Sil y su continuación en el Miño. Dejamos atrás la zona del bierzo y nos adentramos en Valdeorras; zona de Godello y Mencia, con mezcla de otras muchas variedades autóctonas. como la Brancellao, Caiño o la sousón. Contrariamente a lo que se puede pensar en estas zonas no llueve en abundancia. Tienen inviernos fríos y veranos muy cálidos y secos en una altura alrededor de los 450 m. El suelo de aluviales en la zona más baja y pizarra meteorizada en las mas altas.
Lo primero que hicimos al llegar a la zona es visitar la bodega Alan de Val. Bodega de larga tradición que construyeron sus nuevas instalaciones en 2006. Produciendo desde su propias parcelas. Destaca la franqueza de su vinos, el joven de Mencia, libre de todo maquillaje, se muestra directo y sabroso siendo un claro ejemplo de la zona. Un poco más trabajados son la edición de los Pedrazais ya con algo de madera. Destacamos el trato de otras variedades como el As Costiña, 100% brancellao un vino de gran personalidad y Escada Lembranzas elaborado con Garnacha tintorera.De camino a Monforte de Lemos paramos a comer en el Mesón Luis Qiroga. Típico bar de carretera sin pretensiones con generosas raciones y ligero servicio. Probamos las anguilas por lo visto típicas por esta zona. Servidas fritas pasadas por harina. Por la mesa pasaron algunos vinos mas de Valdeorras.
RIBERA SACRA
Continuando el rio Sil nos adentramos en la DO Ribera Sacra. En esta zona el predominio de la uva tinta y de la Mencia es total, aunque se cultiva también la brancellao, la garnacha tintorera y Caiño. Los vinos blancos se vuelven a apoyar en la Godello. El clima es más continental que Atlántico con veranos largos y calurosos y otoños Tibios. El suelo en esta zona es de pizarra más o menos meteorizada. El paisaje de esta zona está caracterizado por grandes pendientes de las terrazas que se asoman al Sil. Con alturas y orientaciones muy variables.
Pudimos visitar la bodega de Pedro Rodríguez Adegas Guimaro , actual punta de lanza de la zona, que esta realizando las cosas más interesantes de la Ribera Sacra. En su Bodega nos explicó su proceso de elaboración y ensamblaje de cada uno de sus vinos. Trabajo y virtuosismo para manejar sus barricas, tanques y froudes para elaborar vinos nuevos, con expresión apegada al terreno. La Mencia trabajada con racimos completos, presandos por pisado para realizar Largas fermentaciones antes de pasar a tanques o diferentes maderas. Estas maderas apenas se notan en la copa, manejadas para no enmascara al vino. Resultado de vinos ligeros de gran elegancia muy cercanos a un cote Rotie o a buenos pagos de Cote d,or.
Después de esta maravillosa cata fuimos al restaurante BERSO , situado en el pueblo Sober, cuidado restaurante donde tomamos unas croquetas y un zancarrón muy buenos.
La Ribera Sacra deja impresionantes vistas de los viñedos escarpados sobre el Sil. Existe una red de miradores repartidos por todo el cañon desde los que se pueden apreciar unas vistas espectaculares.
RIBEIRO
Ya a las orillas del Miño aunque mas cercano a la costa sigue estando protegido de la llegadas de las borrascas del atlántico. Tiene un clima de transición entre mediterraneo y atlántico. Aquí la reina es la Treixadura uva blanca que da vinos afiliados de notas cítricas suponiendo la mayoría de la producción de uva blanca (70%) en las tintas se hace muy poca producción volviendo a usar la Mencía, Sousón y Brancellao. El suelo es granítico meteorizado, arenas.
Visitar esta zona me ha hecho reencontrarme con la Treixadura. Hacia mucho que no la daba una oportunidad. He descubierto Treixaduras afiladasy cítricas con bastante caracter muy interesantes. Una uva a seguir de cerca.
En Beade visitamos una nueva bodega Pateiro vinos de guarda, contando con la generosidad de Iván Pateiro visitamos sus pequeñas parcelas repartidas por varias zonas del valle. Ya en bodega nos defendió la elaboración de sus vinos blancos, buscando que se puedan guardar, quitando el complejo de los vinos blancos de nuestro país donde parece que todos los blancos son para consumo inmediato. Destaca su Treixadura sobre lías todo un descubrimiento.
Para la comida nos desplazamos hasta la Bodega Casal de Armán. A parte de Bodega tiene un Hotel y un restaurante muy recomendable. El Restaurante se encuentra en el alto de Ribadavia, muy cerca del Museo del vino de Galicia. Pudimos probar durante la comida varios de sus propios vinos, donde quiero destacar la Treixadura Pepe Carrasca . En cuanto a la comida yo di buena cuenta a una costilla de vaca extraordinaria.
Después de estos tres días en esta zona, vuelvo en el coche recolocando todos los conceptos aprendidos y todas la experiencias vividas. En Galicia se esta haciendo un buen trabajo y sus vinos se puede decir que son reflejo autentico de sus uvas, clima y terreno, con personalidad propia y alejadas de la globalización. Yo creo que este es el camino .