miércoles, 28 de enero de 2015

David Muñoz, aprovechando el momento.

El pasado octubre ya os mostré el impactante vídeo que abría la nueva andadura de David Muñoz en Diverxo. Las apariciones de este cocinero con estrella han crecido exponencíalmente en estos meses, pasando de un misticismo cercano a lo monacal a una exhibición pública que ha llegado hasta a la prensa del corazón.

El pasado domingo pudimos verlo en Cuatro con el simpático Calleja en su programa, Planeta Calleja en Cuatro. Es siempre interesante ver a estas personas mediáticas fuera de habitat natural. En este caso se fueron hasta Perú donde descendieron rapelando una de las cascadas más altas del mundo, de unos 90 metros. El programa nos sirvió también para que David cocinara en cocinas muy alejadas del confort del nuevo Diverxo mostrando su atrevimiento y destreza. Nos mostró la amplia cultura que tiene de la gastronomía de ese país, referente culinario mundial. Durante el programa come en casa de lugareños y en mercados cosas tan exóticas como ratas y gusanos algo realmente chocante en nuestra cultura.

Ahora también podemos verle en la tele en el último anuncio de mercedes. Buen intento para acercar esta marca de coche a la gente más joven.


Coincidiendo con su puesta de largo en su nuevo establecimiento también protagonizó la campaña de Cosentino.



Esta claro que es su momento, y es su deber explotarlo al máximo y ser lo más precavido que pueda. Que lo aproveche en su carrera como chef de referencia mundial que es y se aleje de los fuegos de artificio y el chabacano famoseo.

domingo, 25 de enero de 2015

Naguar, de Pedro Martino

Es curioso que a veces se acierta por suerte. De visita por la capital de Asturias estaba buscando un sitio para cenar. Estaba solo y no tenía ganas de grandes banquetes; buscaba algo entretenido que saciase mi apetito y que no me dejara temblando la billetera. Paseando por la Avda. Galicia, encontré una serie de restaurantes con posibilidades. Después de analizar las diferentes cartas expuestas en la calle me decidí por entrar en el Naguar.

La entrada es una larga barra que aquel Jueves estaba hasta la bandera, una feria de vino, como presentación de la nueva añada de diferentes Bodegas. Un bodega por cada restaurante. Esta iniciativa es del distrito Gourmet ( asociación de 13 locales de la zona) para mover un poco los jueves de Oviedo.

Al final de la interminable barra hay  un amplio comedor, con una decoración algo vintage, agradable y cómodo. Las mesas están vestidas de forma informal con manteles dobles que tanto se han puesto de moda.
la carta se agrupaba en platos frios y calientes con una variedad que abarca desde unas sencillas patatas bravas Naguar ( 6 € ) a unas Gambas en Panko japones (13,5 €). de unas croquetas cremosas de picadillo (9,5 €) a un steak tartar (19€). La propuesta es muy amplia y te resulta dificil decidirse por cual de ellos decantarse. Tienen dos menus degustación de 40 y 25 € servido para mesas completas.

La jefa de sala me propueso tomar varias de las raciones, ajustando los tamaños para poder probar hasta cuatro de ellas. Es todo un acierto que hace disfrutar al comensal  conocer la cocina del restaurante aunque no tome el menú degustación. al desarrollarse la feria del vino en el establecimiento me sirvieron una botella de la bodega que se presentaba en Naguar. Habla de silencio Syrah 2014, vino joven, recién embotellado con una potencia frutal y un equilibrio y acidez que no había encontrado en las botellas de crianza que he tomado de esta bodega. Buenísimo.








Comencé por el pincho Laureado en el certamen de Mejor pincho de España en Valladolid en el pasado 2013.Coulant de cocido. un simpática porción de coulant de bizcocho fino para tomar de un bocado que explotaba en un sabroso caldo de cocido de garbanzos. Conjunto efectista y resultón aunque algo plano en sabores.

 Globo de pan y ceviche un concepto similar al coulan  pero con alguna diferencia. Un pan fino suflado y relleno de un fondo de ceviche. el crujiente y el interior yodado liquido con un toque fresco que le da el boniato y albahaca . Muy bueno,  juego de texturas y sabores muy conseguido.


Tomé unas Gyosas de verdura y citronela, en una elegante presentación, en el cocedero de bambú, con alguna judía verde tierna y espolvoreado con shichimi tougarashi y sésamo tostado, que le dan un crujiente y un punto de picante muy agradable. El interior de pasta de arroz verduras y pollo estaba sabroso y realzado con una salsa de soja y citronela que hace una composición muy refrescante y sabrosa con un toque picante. Muy bueno.

Acabé con unas Alitas thai confitadas. Plato que no se encontraba a la altura de sus predecesores. Las alitas estaban cocidas en una salsa con toques orientales pero con una acidez totalmente desbordada , posiblemente de lima o citronela. La carne del pollo estaba muy cocida quedando un plato seco y con una salsa desiquilibrada. Un pena.

Pagué 26,70 € sin vino pienso que esta bastante ajustado a lo que disfrute, quizá barato.En resumen un sitio de primer nivel para visitar tan pronto como pueda, para probar todas los platos que no pude probar.

martes, 13 de enero de 2015

El Grand Cru

Recientemente, el pasado 2 de enero,  Rodrigo Vallejo del resturante El Grand Cru ( Santander), fue nominado para el premio de cocinero revelación Madrid fusión 2015. 

El grand Cru lleva pocos años abiertos pero desde sus comienzos este establecimiento es referencia en el centro de Santander. Había visitado bastantes veces el bar  del Grand Cru. Su gran variedad de vinos por copas, como no se ve en otro sitio, invitan a pasar y degustar vinos de diferentes nacionalidades. Dispuestos detrás de una larga barra están todas las botellas con su precio para tomar por copas. Con un diseño moderno de colores cálidos y acogedor, es una barra obligada en la capital, con una oferta de pinchos diferentes. En la planta de abajo se encuentra una mesa situada junto a la cocina que enamorará a cualquier que disfrute con el yantar.

Esta navidades me he pasado por fin por el restaurante. La oferta es un tanto informal con una mesa vestida con dos pequeños manteles y una simpática carta que simula a un periódico. La carta me encanta, ofrece platos de diferentes cocinas:  tartar de aguacate y tomate, gyozas ..como entrantes, Tataki de bonito,bacalao al pilpil.. en los pescados y rollito de primavera de rabo de vaca, entrecot trinchado.. en las carnes, son algunos de los ejemplos. Esta mezcla de diferentes cocinas se esta imponiendo en nuestro entorno culinario.Cada vez son más los cocineros que se atreven a sumergirse en otras cocinas para aderezarlas con sus conocimientos locales.

De lo que pedimos me enamoró  las gyozas de secreto ibérico y algas al vapor, presentado en una vaporera de bambú, una buena ración de finas empanadillas rellenas de cerdo acompañadas de alga wakame. En cambio me dejó un poco frío el Tataki de bonito con ragout de frutos rojos, tirabeques y sésamo , el centro del bonito se encontraba cocido, pienso que por exceso de tiempo de marinado, con lo que no consigue la diferenciación de texturas entre el exterior, bien cocinado, con su interior prácticamente crudo. una pena. El resto de la comida discurrió correcta  regado por un sabroso Ostatu selección 2010.

Un lugar que únicamente por la variedad de vinos y de platos que ofrece, merece otra visita.