Ayer visitamos el restaurante ASUBIO. Este pequeño restaurante lleva abierto dos años desde la nueva direccion de Nacho Basurto. Después de participar en proyectos más ambiciosos como fueron el Molino y la Cúpula del RHIN, Nacho se reinventa tomando este restaurante con un concepto más desenfadado que sus anteriores propuestas. El concepto de Gastrobar se basa en el intento de acercar la alta cocina de los grandes restaurantes a un público más popular, al que no le apetece los encorsetamientos y formalismos de los restaurante de alto copete ( ni pagar sus altos precios). El asubio se ajusta perfectamente a esta definición dando una oferta diferente y de buena cocina a buenos precios. se encuentra en un pequeño establecimiento con una larga barra que presenta una gran variedad de pinchos. La decoración es clásica y problamente necesite un reforma, pues no es reflejo de la calidad de su cocina. En la parte superior se encuentra el restaurante. Sencilla disposición de mesas un poco juntas pero perfectamente acondicionadas para la oferta del restaurante. La carta es bastante larga con platos divertidos y diferentes con buenos precios que oscilan entre de 6 € a 20 €. El servicio es ligero y atento. Comentando los platos en su justa medida sin interrupir la conversación de los comensales haciendo resaltar la cocina sin que ello vaya en decrimento al disfrute del comensal. Queda un poco corta la carta de vinos aunque en su favor hay que decir que tiene diferentes denminaciones de origen de España , echando en falta algunas importantes referencias de algunas de ellas.
Fuera de carta nacho Basurto nos ofrecio unas Cocktel de buey de mar. Presentado en copa de Martini con una capa en el fondo de carne de buey de mar cocinado al estilo dosnostierra y por encima una espuma ( creo de de patata). El conjunto estaba muy sabroso aunque no hubiera estado mal un poco más de buey de mar en la proporcion. Buen plato.
Seguimos con una Tempura de bocartes y guindilla dulce. Una fina tempura crujiente que daban un toque distinto a los bocartes (similares a los bocartes fritos con harina pero más crujiente) y a las guindillas. Es un plato discreto pero divertido.
La tercera entrada fue una Parrillada de verduras. Realizadas a la plancha con una cocción aldente y aderezadas con un sofrito demásiado fuerte para mi gusto. Fue lo que menos gusto de la cena. correcto.
Depues como plato principal tomamos Tataki de Atun. Presentan el fileteado de atún crudo por el centro y ligueramente cocinadas por el exterior. muy bueno. También pedimos Waygu. Carne de la costilla de este tipo de buey confitada a baja temperatura y presentado con melón a la plancha. Fue el mejor plato de la noche. El proceso de confitado conservaba la carne jugosa y por interior queda sonrosada pasado brevemente por la plancha.
Para terminar nos tomamos una tabla de queso. correcto.
El sitio me gusto mucho, la calidad y diversidad de los platos. Este concepto de restaurante hace que no dudes en repetir pues sabes que puedes disfrutar, de otra forma que en los grandes restaurantes, pero a unos precios mucho más económicos. Seguro que repetire.
